Como personas inevitablemente la vida nos pone en encruzijadas. Momentos y circunstancias en las que no sabemos muy bien qué hacer, cómo sentirnos o qué decisiones tomar. Son estos momentos los que marcan un antes y un después, sobre todo si aprendemos a dejarnos llevar por lo mejor, podemos sacar provecho y por tanto, aprender a saborear cada experiencia que la vida nos pone. No hay formulas universales para hacerlo, pero como diría el Poeta Machado: "Caminante no hay camino, se hace camino al andar". Que tu decisión de crecer personalmente, este marcada por la esperanza de trazar caminos más plenos y comprometidos con el bien.

Más allá de los títulos (que son importantes, claramente). Acompaño procesos humanos. Y me atrevo a acompañarlos, porque voy encontrando la sabiduría y el método en mi proceso permanente de crecimiento. Mi experiencia ha sido vitalmente marcada por un método que trabaja el crecimiento personal, el espiritual y el compromiso con el entorno.

En una epoca de mucho ruido en dónde se libra una batalla por captar nuestra atención, es fundamental el espacio para interiorizar, para el silencio, para escucharnos. La desición de iniciar tu proceso de crecimiento personal, es una inversión que con el tiempo, comprederás que valió la pena.

Me licencié en psicología Clínica en el 2015 por la Universidad Rafael Landívar. He apoyado en varios talleres de autoconocimiento y crecimiento personal para jovenes y adultos. Como laboro para una obra de la Compañia de Jesús, me ha marcado y he profundizado en la metodología de la Espiritualidad Ignaciana y el Discernimiento